CUADRO DE MANDOS

Partiendo de la matriz de transformación y un conocimiento cierto de la capacidad transformadora, la aplicada y la potencial, de una empresa, entidad social, administración o territorio, derivamos en la creación de un cuadro de mandos.

La matriz hereda de los informes no financieros algunas características que no la dibujan como la idónea para la gestión continua del valor. Es necesario llegar a una operativa que permita contar con un seguimiento de corto plazo sin un coste excesivo, desde la racionalidad económica. El haber creado la matriz, con los resultados e indicadores de cambio, nos permite utilizar la metodología del SROI y el informe GECES*, para crear un cuadro de mandos que sea la herramienta operativa del seguimiento. La matriz facilita el diseño estratégico de transformación mientras el cuadro de mandos la gestión.

Teniendo todos los indicadores y sus ponderaciones, podemos seleccionar con claridad aquellos que resulten más significativos para la empresa, entidad o administración pública. Serán significativos por su magnitud, por lo explicativo del propósito, por su capacidad diferenciadora o por aquello que la entidad considere oportuno. De cada resultado de cambio de esa selección se estudia sobre qué grupos de interés actúan y aplicaremos los indicadores que ya cuantificamos previamente. Es el momento de monetizarlos utilizando proxis financieros apoyados en herramientas existentes como; el coste de oportunidad, los precios hedónicos, el coste de desplazamiento, el de reposición o el contingente.

Esto no significa que todo el valor identificado sea generado exclusivamente por la empresa o entidad objeto de medición. Para poder decir eso deberíamos depurar el resultado y aislar el valor generado por el centro objeto de estudio. Sin embargo, ese valor creado sí alcanza a la sociedad. Dado que lo que estamos mostrando es el potencial transformador para la sociedad éste responde al total, sea o no resultado exclusivo de la acción de la estructura sujeta a estudio.

El cuadro de mandos nos ofrece una herramienta para la gestión y el seguimiento, lo que vuelve a coincidir con las exigencias del informe GECES del Parlamento Europeo. Es este el paso más importante de la matriz de transformación. Su metodología de construcción y su derivación en el cuadro de mandos nos permite pasar de las herramientas de diseño estratégico a una herramienta de gestión que, como solicitan las empresas, permite llevar a la cuenta de explotación y a la patrimonial el valor generado.

* ( GECES Informe elaborado por la subcomisión del Parlamento Europeo para la medición del valor social y ambiental. Aprobado en 2014 por el Parlamento Europeo como guía para la medición . Puedes descargarlo AQUÍ)

PRIMER PASO

Realizamos un análisis comparativo de la matriz en el momento de inicio y de fin del periodo a analizar. El siguiente formulario nos ayuda recogiendo los datos de estas dos matrices y las previsiones. Planificación que la empresa o entidad se planteó ex-ante.
Una vez introducidos los datos en la página 2 del formulario encontraremos, en la página 3, la variación que se ha producido en términos absolutos y porcentuales, así como la diferencia entre los porcentajes comprometidos por la previsión y los realmente conseguidos.

SEGUNDO PASO

El siguiente paso nos permitirá establecer los resultados de cambio y los indicadores que queremos formen parte del cuadro de mandos. Para ello, construimos una tabla en donde situamos en un eje los resultados que desde la estrategia de la empresa o entidad son los más significativos. Las razones pueden ser diversas pero, en cualquier caso, al ser una herramienta de gestión será la entidad o empresa la que realice esa elección en función de sus criterios.
En el segundo eje colocaremos los resultados de cambio de la matriz. De esta forma podremos establecer las intersecciones como la vía de selección de los resultados de cambio e indicadores que conformarán el cuadro de mandos.

Para descargar la tabla pulsa AQUÍ

TERCER PASO

Establecidos los resultados de cambio en el segundo paso cogeremos sus indicadores de cambio de la matriz de transformación para trabajar el siguiente paso que es la monetización de los resultados explicados por estos indicadores.
Utilizaremos la metodología SROI ( Retorno Social de la Inversión) para trabajar con el cuadro de mandos.
(se puede acceder a un manual para el uso de esta metodología AQUÍ)

GRUPOS DE INTERÉS

Necesitamos identificar los grupos de interés que afectan o se ven afectados por nuestra empresa o entidad y de todos ellos seleccionaremos los más significativos para explicar el impacto de nuestra actividad.
Contar con los grupos de interés nos permitirá dar una visión 360 grados del resultado de nuestro trabajo.
Cada uno de los resultados de cambio de nuestro cuadro de mandos, y consecuentemente los indicadores que los explican, pueden afectar a distintos grupos de interés. Es necesario saber cuáles de los grupos de interés seleccionados son afectados, y en qué magnitud, para tener un conocimiento del impacto de las acciones acometidas. Cada resultado de cambio explicado con uno o varios indicadores necesitará ahora de proxis financieros que moneticen las afecciones identificadas.

Tenemos unos resultados de cambio que hemos obtenido del cruce de los resultados de cambio de la matriz con los objetivos de la empresa y/o entidad.
Tenemos unos indicadores de la matriz que explican el resultado de cambio.
Tenemos un mapa de los grupos de interés más significativos de la empresa o entidad.
Tenemos identificados los cambios en cada uno de los grupos de interés.

Ahora necesitamos proxis financieros que nos posibiliten monetizar el conjunto de todos los cambios que se están produciendo sobre cada uno de los grupos de interés afectados.

CUARTO PASO

PROXIS FINANCIEROS

Son aproximaciones financieras que nos permiten monetizar los valores sociales y ambientales creados en términos económico-financieros. Homogeneizan el lenguaje posibilitando su adición al resto de parámetros de la gestión económica.
Para encontrar el proxi que puede ser de utilidad para cada indicador de cambio contamos con unas metodologías:

Método de coste de oportunidad

Este método calcula el valor de las oportunidades a las que se renuncia cuando un recurso se utiliza para obtener un determinado producto o servicio en lugar de otro. Supone que el valor es equivalente, por lo menos, al valor de la mejor alternativa a la que se renuncia para obtener el bien o servicio deseado. Por ejemplo, si el estiércol debe ser utilizado como combustible, el coste de oportunidad podría ser los aumentos de las cosechas a las que se renuncia al utilizar el estiércol como combustible en lugar de abono para los suelos.

Método costes de reposición

También se denomina método del comportamiento defensivo. La idea que subyace al mismo es muy sencilla: ante un cambio en la calidad ambiental, por ejemplo, aumento de los niveles de ruido en las ciudades como consecuencia del incremento del tráfico rodado, las personas incurrirán en gastos encaminados a mitigar dicho efecto -como puede ser el doble acristalamiento de sus ventanas- evitando la reducción en su nivel de bienestar que implica el mayor ruido. Por tanto, el valor de una mejora en la calidad ambiental se deduce por la disminución de los llamados gastos defensivos. En definitiva, se trata de averiguar el coste que supone reponer el medio ambiente a su nivel original.

Método costes hedónicos

Este método desglosa el precio de un bien privado, de mercado, en función de varias características. Estas características tienen un precio implícito cuya suma determina, en una proporción estimable, el precio del bien de mercado que se observa. Así, el precio de una vivienda puede determinarse por la agregación de los precios implícitos de sus características y de las del entorno en el que está ubicada. Por procedimientos econométricos se calcula el peso de las variables que determinan el precio final de la vivienda y, bajo determinados supuestos, se estiman los precios de sus características, por ejemplo: superficie de la casa y de la parcela, tipología, número de habitaciones, de baños, antigüedad, distancia al centro de la ciudad, nivel de polución atmosférica o atractivo del paisaje.

En otras palabras, dos casas idénticas pero ubicadas en zonas con distinto nivel de polución ambiental tienen, presumiblemente, precios distintos. La diferencia en el precio de la vivienda se considera el precio implícito de la variación en los niveles de contaminación atmosférica. Bajo determinadas condiciones de la función de precios implícitos puede identificarse la función de demanda de la característica escogida y, en consecuencia, el excedente del consumidor. Así, variaciones en la provisión de tal característica (por ejemplo, nivel de polución) comportan diferencias, medibles en euros, en el bienestar de las personas.

Un ejemplo clásico del uso del modelo de los precios hedónicos es el de la externalidad negativa que producen los aviones sobre los residentes próximos a aeropuertos. El valor de la pérdida de bienestar debido al ruido y riesgo de accidentes se puede medir por la disminución en el precio de la vivienda por este concepto.

Método costes de desplazamiento

El método o modelo llamado del coste del desplazamiento se aplica principalmente a la valoración social de un espacio de interés medio-ambiental y recreativo concreto, pero es extensible a otros bienes. Bajo determinados supuestos, permite detallar la función de demanda de dicho espacio y, en consecuencia, el excedente del consumidor.

En su formulación más directa, la idea del método del coste del desplazamiento y el procedimiento para aplicarlo, son muy sencillos. Aunque el precio de entrada a un espacio de interés natural sea cero, el coste de acceso es generalmente superior a cero, dado que deben incluirse por lo menos los gastos ocasionados por el desplazamiento. En general, cuanto más cerca se reside del espacio cuyo disfrute se quiere valorar, menores son los gastos en que se incurre y mayor es, en consecuencia, el número relativo de visitantes. Así se puede detectar la función de demanda entre número de visitantes (cantidad) y coste del desplazamiento (precio).

Método valoración contingente

El método de valoración contingente pretende estimar la máxima disposición de un individuo a pagar por la provisión o mejora de un bien de no mercado o, alternativamente, la mínima disposición a ser compensado por la pérdida o disminución del disfrute del mismo bien. El uso de una u otra modalidad depende en gran medida de la definición de los derechos de propiedad sobre el bien que se desea valorar. La valoración contingente se considera una forma de estimación directa, ya que se pregunta directamente a una muestra de la población en cuánto valora un determinado bien medioambiental y/o social.

El método de valoración contingente intenta medir, en términos monetarios, los cambios en el nivel de bienestar de las personas debido a un incremento o disminución de la cantidad o calidad de un bien. Esta medida, en unidades monetarias, suele expresarse en términos de la cantidad máxima que una persona pagaría por un bien. Es decir, lo que se suele conocer por la expresión: disposición o disponibilidad a pagar o al pago. En el caso de bienes que no implican un coste monetario directo para el consumidor, esta disposición a pagar por el bien equivale al beneficio que tal consumidor obtiene. Por ejemplo, el vecino que disfruta de la plaza pública cercana a su domicilio, en la que no se hace pagar entrada, tendrá como beneficio para cada visita el equivalente a lo que estaría dispuesto a pagar como máximo en concepto de precio de entrada.

Alternativamente, el método de valoración contingente permite también hallar la máxima disposición a ser compensado por la pérdida de un bien. Por ejemplo, cuanto dinero, como mínimo, nos deberían pagar para que nos quedáramos indiferentes entre perder la plaza pública y obtener dicha cantidad de dinero.




      La elección del método de valoración a emplear en cada situación vendrá influenciada por una serie de factores, entre los que se encuentran; el tiempo y los recursos disponibles para efectuar la valoración, el tipo de agentes económicos afectados por el cambio, la naturaleza y magnitud de esos cambios y la disponibilidad de información para efectuar la evaluación.

      Las condiciones anteriores también determinarán el nivel de debate y precisión de los estudios. En este sentido, las limitaciones de datos y de recursos para llevar a cabo la valoración económica de bienes y servicios sociales, pueden aconsejar, en determinadas circunstancias, utilizar y adaptar datos y resultados procedentes de otros trabajos de valoración existentes, en lugar de obtener directamente toda la información primaria. Las ventajas de la transferencia de valores son obvias, sin embargo, este tipo de actuación no está exento de graves dificultades.

      PROCESO DE TRABAJO CON EL CUADRO DE MANDOS

      El siguiente cuadro muestra el proceso a realizar desde la selección de los resultados obtenidos en el tercer paso.
      Cada uno de estos resultados de cambio seleccionado tiene uno o más indicadores identificados en la matriz de transformación. Cada indicador puede afectar a uno o varios grupos de interés. La afección a cada grupo vendrá explicado , monetizado, por el o los proxis financieros creados para ello.